
Quincy Jones, el aclamado productor musical, falleció a los 91 años en su hogar en Los Ángeles, rodeado de su familia, según confirmó su publicista. A lo largo de su ilustre carrera, logró hitos notables, incluyendo la producción del emblemático álbum “Thriller” de Michael Jackson. También compuso bandas sonoras galardonadas para cine y televisión y trabajó junto a grandes figuras del espectáculo como Frank Sinatra y Ray Charles.

En un comunicado, su familia expresó: “Con el corazón lleno pero roto, debemos compartir la triste noticia del fallecimiento de nuestro padre y hermano Quincy Jones. Aunque representa una pérdida inmensa para nosotros, celebramos la extraordinaria vida que llevó y sabemos que nunca habrá otro como él”.

Nacido el 14 de marzo de 1933 en el sur de Chicago, Jones superó una infancia marcada por la violencia de las pandillas para alcanzar grandes éxitos en el mundo del espectáculo. Se convirtió en uno de los primeros ejecutivos afroamericanos en triunfar en Hollywood y dejó un legado musical que incluye momentos icónicos de la industria estadounidense. Su compromiso con los derechos civiles fue fundamental en su vida; en la década de 1960, apoyó públicamente a Martin Luther King Jr. y más tarde se unió a Bono en iniciativas humanitarias. También fundó The Quincy Jones Listen Up Foundation, enfocada en construir viviendas en África y ofrecer clases de música a jóvenes.

Colaboró con artistas como Ray Charles y Ella Fitzgerald, y participó en giras con Count Basie y Lionel Hampton. Realizó arreglos para Sinatra, destacándose su célebre versión de “Fly Me To The Moon”. Compuso las bandas sonoras de la miniserie “Raíces” y las películas “Al calor de la noche” y “El color púrpura”, esta última le valió una nominación al Oscar. En 1995, recibió un premio de la Academia por su labor humanitaria y estaba programado para recibir otro en 2025 por su trayectoria. Organizó la ceremonia de inauguración del presidente Bill Clinton y supervisó la grabación de “We Are the World”, el famoso disco benéfico de 1985 que ayudó a combatir la hambruna en África. Lionel Richie, coautor de la canción, lo describió como “el maestro de orquesta”. En el documental “La gran noche del pop”, Richie recordó que Jones pedía a los músicos que dejaran sus egos fuera del estudio para lograr un mayor impacto.

Los logros más destacados de Jones probablemente sean sus producciones con Michael Jackson: “Off the Wall”, “Thriller” y “Bad”, álbumes que lograron un atractivo universal. Para “Thriller”, Jones incorporó elementos memorables, como el solo de guitarra de Eddie Van Halen en “Beat It” y la narración de Vincent Price en la canción que da nombre al álbum, que vendió más de 20 millones de copias solo en 1983.

“Si un álbum no tiene éxito, todos dicen que es culpa del productor; así que si tiene éxito, también debería ser tu responsabilidad”, comentó Jones en 2016 durante una entrevista con la Biblioteca del Congreso de EE. UU. “Las canciones no aparecen de la nada. El productor debe tener la habilidad y experiencia necesarias para llevar la visión a su finalización”, agregó.

A lo largo de su carrera, recibió 28 premios Grammy, dos Oscars honorarios y un Emmy por “Raíces”. También fue galardonado con la Legión de Honor de Francia, el Premio Rudolph Valentino de Italia y un homenaje del Centro Kennedy por sus contribuciones a la cultura estadounidense. Su vida fue objeto de documentales como “Listen Up: The Lives of Quincy Jones” (1990) y el más reciente “Quincy”, dirigido por su hija, la actriz y directora Rashida Jones, disponible en Netflix.

